Origen y Fundación del Barrio

La Villa Caupolicán es parte de las ocupaciones que se realizaron durante la década del 50 y 60, como respuesta a la falta de política pública en materia de vivienda generando asentamientos humanos informales en los sectores periurbanos de Santiago. Uno de los eventos históricos que dio origen a varias poblaciones actuales en Santiago, fuel el campeonato Mundial de Fútbol realizado en el año 1962, que expulsó a diferentes poblaciones o tomas ubicadas en el lugar donde actualmente está instalado el Estadio Nacional.

En el caso de la Villa Caupolicán, la llegada de los primeros residentes proviene principalmente de 4 Comités de Vivienda que corresponden a “Santa Julia”, “Rebeca Matte”, “Áreas Verdes”,  y “Los Alerces”. La mayor parte de los primeros residentes eran vecinos que habían vivido tiempo antes en la actual Santa Julia correspondiente a las unidades vecinales 3 y 4 de la comuna. Naturalmente hubo otros grupos de vecinos que venían de otros sectores, pero en general la mayoría venía de sectores cercanos que actualmente conforman la comuna de Macul, entre ellos también vecinos de la Población 23 de Enero.

En el proceso de instalación del barrio, su origen se constituye a partir de la ocupación de terrenos tipo chacra que se utilizaban para uso agrícola y la fabricación de ladrillos como también en galpones y bodegas. Estos terrenos tenían originalmente 5,8 ha y eran de propiedad particular, después de la ocupación y formación del campamento, fueron catastrados en un plano el año 1980 por el Servicio de Vivienda y Urbanismo.

En el año 1981, la Municipalidad de Ñuñoa en conjunto con la SEREMI de Vivienda, decidió la radicación de este campamento, por lo cual SERVIU procedió a la expropiación de este predio. En consecuencia, el SERVIU realizó una propuesta de loteos formal el año 1983 planificando el barrio a través del establecimiento de espacios destinados para áreas comunitarias, viviendas, calles y pasajes. Esta propuesta es modificada por razones de calidad del suelo estableciendo en definitiva la distribución actual del barrio bajo la aprobación de la Dirección de Obras de Ñuñoa la cual contaba con las siguientes características:

• Se consideran 326 lotes para la construcción de viviendas sociales.
• Dos lotes para Sede Social.
• Un lote para iglesia.
• Dos lotes para área verde.
• Tres lotes de “Reserva Municipal”.

Porteriormente en el año 1985 se instalan matrices de agua potable, y a través del Programa de Lotes con Servicio, se construye en los lotes de vivienda 326 casetas sanitarias, lo que significó una inversión de 21.818 UF, obra que se financió en un 52% con aportes del Estado y un 48% con crédito BID.

En el año 1986 se terminan las obras de urbanización instalando alumbrado público, alcantarillado y pavimentación mínima que contrató la Municipalidad de Macul en convenio con SERVIU Metropolitano, con lo cual se finiquitan las obras de saneamiento de este campamento. A partir de esa fecha se han desarrollado diversas acciones como por ejemplo el mejoramiento y pavimentación de calzadas de hormigón de pasajes y calles de todo este sector. Cabe mencionar que este proceso se realiza bajo el alero de la que hasta ese momento era la principal política habitacional del país, la operación sitio, que establecía que frente a la escasez de recursos y viviendas, se entregaría a cada persona que lo requiera, un terreno con una conexión básica a servicios y una caseta sanitaria, la cual es una pequeña unidad de edificación que cuenta con baño y cocina. A partir de ahí se consideraba la posibilidad que cada familia, con sus propios medios y con apoyo de subsidios y programas, pudiera progresivamente ir ampliando su vivienda, logrando mejorar considerablemente su calidad de vida.

La fundación del barrio por tanto fue un proceso que duró aproximadamente más de 10 años desde la toma y construcción del campamento, lo cual según la comunidad fue consecuencia de la falta de reacción del estado frente a la formalización de las viviendas, esto al nivel del contexto comunal originó que las familias estuvieran continuamente “buscando soluciones” de vivienda por la comuna lo cual determina por ejemplo que muchas familias estén distribuidas por diferentes poblaciones, como también en comunas cercanas como Peñalolén y San Joaquín.